Con un RSI que está por debajo de 50, los vendedores ganan terreno en medio del comportamiento lateral que limita los niveles de soporte y resistencia de un triángulo. Es importante mencionar que este triángulo se intentó romper al alza pero falló, lo que aumenta la intención vendedora del mercado.
El nivel de soporte clave está en los 38.000 que si es roto a la baja abre la posibilidad de caer a los 28.000 y 20.000. La magnitud del movimiento obedece a que el ADX muestra la debilidad de la tendencia y confirma el lateral, pero una vez roto esa zona de acumulación implica el stop loss de los largos y por lo tanto una mayor fuerza en la caída y la posibilidad de que el mercado bajista se extienda por más tiempo.